La bomba de calor mantiene un local o recinto a una temperatura determinada durante todo el año y produce agua caliente, de forma sencilla, económica y respetuosa con el medio ambiente. Una de las grandes ventajas que ofrecen es la versatilidad que tienen estos equipos, ya que permite que este sistema de climatización se adapte, además de al sector doméstico, a cualquier otro, ya sea comercial, servicios, industrial, transporte, etc. La bomba de calor se puede implantar en todos los sectores citados anteriormente y es capaz de cubrir necesidades de climatización como aire acondicionado y calefacción, agua caliente sanitaria, calentamiento de agua para usos industriales y procesos de secado como por ejemplo para embutidos o madera.
Y es que la versatilidad consolida a la bomba de calor como un sistema flexible con múltiples aplicaciones y que puede ser implementado en diferentes ámbitos. Por otro lado, este es un proceso respetuoso con el medio ambiente que disminuye las emisiones de CO2, ya que utiliza energía procedente de fuentes renovables, produciendo más energía de la que consume, lo que contribuye a la eficiencia energética. La bomba de calor es también capaz de recuperar energía residual procedente de diferentes procesos. Además de la gran implantación de estos equipos en el sector doméstico, la incorporación de los mismos en otros sectores está cada vez extendiéndose más.
En el sector de comercio y servicios la bomba de calor se usa para calefacción, refrigeración y generación de agua caliente sanitaria en centros comerciales y pequeños comercios, gimnasios, bancos, etc. En el sector industrial la bomba de calor tiene múltiples aplicaciones enfocadas a la climatización de locales, calentamiento de agua y procesos fabriles. La bomba de calor es de gran utilidad en la industria, desde el punto de vista del ahorro energético, ya que, entre otros beneficios, permite aprovechar la energía en forma de calor, que anteriormente se desechaba al ambiente.
Por último, en el sector de transporte, algunos países europeos, como por ejemplo Alemania y Países Bajos, ya han incorporado equipos bomba de calor en autobuses eléctricos para generar aire acondicionado y calefacción. El objetivo es reducir la emisión de gases de efecto invernadero para contribuir al cumplimiento del objetivo “20-20-20”, que entre otras cuestiones pretende reducir un 20 por ciento las emisiones de CO2 en el año 2020. Y es que en todos estos sectores, los beneficios de la bomba de calor son el ahorro, un mayor confort, también una mayor fiabilidad, son equipos más eficientes energéticamente, son aparatos sostenibles y cuidan el medio ambiente, suelen tener un fácil mantenimiento y en ellos se puede usar energía procedente de fuentes renovables.