A continuación queremos hablarte de algunos de los mitos y leyendas que circulan sobre los aparatos de aire acondicionado y que son falsos. Aunque los nuevos dispositivos incluyen mejoras que permiten mantener una temperatura constante entre otras es cierto que sigue habiendo algunas creencias equivocadas. Por ello, intentaremos resolver las más básicas y dar consejos para disfrutar del aire acondicionado. La primera suele ser que con el aire acondicionado te resfrías, y no falta razón, los cambios de temperaturas bruscos pueden afectarnos pero si usamos un aire a una temperatura idónea no existen riesgos. Dicha temperatura idónea se encuentra entre los 20 y 25ºC.
Sobre lo de poner el aire a una temperatura baja para refrescarte antes, da igual que pongas el aire a 18 o a 22ºC, el tiempo que tardará en conseguir dicha temperatura es la misma. Siempre y cuando trabajen a la misma velocidad. Por tanto mejor fijar la temperatura que queremos desde un principio y por supuesto no colocarnos debajo del chorro de aire acondicionado porque entonces sí es probable que caigamos malos de la garganta, con una gripe o con un resfriado. Por otro lado, si cuando lleguemos a casa queremos tener una temperatura idónea podemos optar por programar las horas de funcionamiento o hacer uso de un control remoto siempre y cuando nuestro aparato de aire acondicionado lo permite.
Por otro lado, sobre lo de que es malo dormir con el aire acondicionado puesto, es malo siempre que la temperatura fijada en el aparato sea excesivamente baja. Cuando dormimos la temperatura corporal desciende, por tanto no podemos dormir con el aire a la misma temperatura que para el resto del día. Si lo colocamos entre 24-25ºC conseguiremos una sensación térmica agradable y nos facilitará el descanso. Consulta la documentación de vuestro aparato de aire acondicionado pues igual dispone de alguna función especial para usar por las noches, de modo que la temperatura vaya subiendo según pasan las horas.
Hay otro mito que es que el aire de estos aparatos es de peor calidad, si el aparato de aire acondicionado no lleva filtros de ningún tipo pues puede que sea pero, pero la mayoría de fabricantes incorporan filtros que mejoran la calidad del aire. Dejar el aire acondicionado encendido consume menos que apagando y encendiendo es falso, a menos que vayamos a salir de casa sólo unos minutos siempre es mejor apagarlo. Consumiremos menos energía y por tanto ahorraremos en la factura. Y por último, el aire acondicionado reseca el ambiente. Este sí es cierto pero no en todos los lugares se nota por igual. Depende del número de horas que esté funcionando y la humedad de la zona para que sea más o menos notable.